martes, 20 de marzo de 2012
Historias I:
Capítulo IX: Ya nada es igual.
P#
No quisiste insistir más. Le dejaste un perdón en el oído y te fuiste. Te quedaste escuchando como ella lloraba detrás de la puerta. Por un lado, estabas feliz porque por un momento tuviste sus labios jugando con los tuyos. Pudiste demostrarle con un beso todo lo que estabas empezando a sentir por ella. Pero por otro, no la querías ver mal y eso te partía el alma y el corazón.
- ¿Qué haces acá? - te dijo alguien que no reconociste en un primer momento. Levantaste la vista y te diste cuenta que era tu preceptor, Mariano. - ¿No te explicaron que no podes estar en el lado de los cuartos de las mujeres? - Era una persona muy fría y, para vos y tus compañeros, era "malo".
- Perdón, ya me voy - le contestaste cordialmente. No querías pelear con él en ese momento, sabías que no ibas a responder de vos y harías cualquier locura.
- No, perdón no. Me acompañas a firmar el cuaderno de disciplina y te voy a hacer un informe, Lanzani - lo miraste muy mal y empezaste a caminar. Sabías que él estaba detrás tuyo, sabías que te ibas a comer un informe y una firma, sabías que el castigo que tus papás te iban a dar sería terrible porque nunca había pasado algo así. Pero nada de eso te importaba. Recordaste con una sonrisa ese beso que para siempre estaría en tu mente y en tu corazón. - ¿De qué se ríe, Lanzani? - Te preguntó, serio, Mariano.
- De nada.
- Espero que no se esté riendo de mí porque las consecuencias serán más graves que éstas.
- No - decías mientras seguías recordando ese maravilloso beso con una sonrisa. Finalmente firmaste, Mariano elevó el informe a dirección y llamó a tus padres para avisarles lo sucedido. A vos no te importaba, por primera vez no te importaba lo que piensen tus papás. Eras feliz.
M#
No encontrabas a Daniela ni a Rocío por ningún lado, pensaste que quizás estaban en la fiesta como vos deberías hacerlo. Te resignaste a dejar de buscarlas para contarle lo que te estaba pasando, eran las únicas dos que sabían lo que te pasaba y te entendían.
Tu celular sonó con tu canción preferida y, sin mirar quién te llamaba, atendiste: - ¿Hola?
- Hola hermosa, ¿te desperté? - Esa voz te descolocó, era él. Tu "algo", Benjamín. ¿Justo hoy tenía que llamar?
- No, no. Estaba por... irme a dormir.
- Ah, te extraño bebé.
- Yo... yo también... - dijiste sin ganas.
- Lali, no aguanto más - dijo alguien entrando a tu habitación. Era Peter... Sí, definitivamente tenías mucha mala suerte - necesito sentir tus labios otra vez, necesito que estés conmigo un minuto más... - Evidentemente, Peter no se había dado cuenta que estabas hablando por teléfono.
- ¡¿QUÉ?! - Te gritó Benjamín en el teléfono, había escuchado todo. Vos no tenías palabras para contestarle. Ni a Benjamín ni a Peter. - ¿A quién besaste Mariana? ¿Cómo podes hacerme ésto? Sos una cualquiera.
- ¡NO SOY UNA CUALQUIERA! - Gritaste en el teléfono. En ese momento, Peter se dio cuenta con quién estabas hablando. - ¿Sabés a cuántas te habrás besado vos éstos días que no estuvimos juntos? ¡MILLONES SEGURO! ¿Y me decís cualquiera a mí?
- Ese colegio te cambió Mariana, ¿cómo podes pensar así de mí?
- ¿Vos te pensas que soy idiota, Benjamín? - Dijiste con tus ojos inyectados en lágrimas. - Ya no soy la misma, tenes razón. Ya nada es igual...
- Lo sé Mariana, lo sé. No quiero que vuelvas llamándome y pidiéndome perdón, porque no voy a estar para darte una oportunidad.
- ¿Vos me estás cargando Benjamín? ¿Cuántas veces yo te perdoné una infidelidad? Cuatro veces, ¡CUATRO!
- Es verdad, pero por lo menos te lo dije y te pedí perdón porque te amaba.
- No me mientas más, Benjamín. No me mientas más - dijiste y cortaste la llamada. Peter seguía ahí, no hizo más que abrazarte fuerte y dejarte llorar tranquila. Te sentías segura en sus brazos.
- Perdóname - te dijo él - no sabía que estabas hablando por teléfono con... tu novio.
- No, no es mi novio... - dijiste alejándote de él. - Vos no tenes la culpa, no sabías que estaba hablando con él.
- Sí, porque ahora, digamos, que cortaron por mi culpa.
- No, Peter. Las cosas ya no eran las mismas...
N#
No fue nada fácil la vida de Eugenia como vos creías. Estaba sola en el mundo, sus papás nunca compartieron nada con ella. Ni siquiera su primer día de secundaria, el cual es muy importante para los hijos. En cambio, en ese momento estuvo quien es hoy su amo de llaves, Raul.
- Pensé que no eran jodidas las vidas en éste ambiente - dijiste cuando terminó de contarte su infancia.
- Yo quería pensar lo mismo. Aunque no lo creas, antes de conocerte no era así. Era más soberbia.
- ¿Yo te cambié? - Preguntaste con cierta ilusión en tus ojos, la cual se dejaba ver.
- No es que vos solo me cambiaste, Mariana también. Siento que ella es muy parecida a mí, porque yo no soy de confiar mucho en las personas. Es como que tengo una coraza, un caparazón que no me deja ser lo que de verdad quiero ser...
- Ya sé qué vamos a hacer mañana entonces - dijiste sonriendo.
- ¿Qué?
- Vas a hacer todo lo que te gustaría hacer y yo te voy a acompañar - ella te sonrió como nunca antes. - Y no acepto un no como respuesta.
E#
Sabías que mañana sería un día inolvidable para vos. Nicolás se fue porque llegaron Candela y María, y vos te quedaste pensando en todo lo que te gustaría hacer.
- Bailar, reír, soñar. All I need is vos - cantabas mientras te terminabas de cambiar para irte a dormir.
- Nunca te escuché cantar, gorda - te dijo Candela. Ella era en la que más confiabas de las dos. - Cantás lindo, tendrías que inscribirte en el taller de canto. Pero sería muy grasa porque está Marianegra y Gastón - "Marianegra" le decían Candela y María a Mariana.
- No le digas así. Y sí, me inscribiría. Gracias por darme ese dato - le dijiste sonriendo. Definitivamente, ya nada era igual para vos.
Ésta historia continuará.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
muii buenooo el cap me encantooo ya me puseee al dia con la noveeee me encantooooo bueno espero que estes bien besos
ResponderEliminarGraciassss!
Eliminarahhh buenooo le fue infiel CUATRO veces y se da el tupé de decirle que es una cualquiera?! TARADO!
ResponderEliminarME ENCANTA!!!! ;)
Espero el próximo! besos
Así es Benjamín (en mi novela obvio). Gracias por leer siempre ♥
EliminarYa se van afianzando las amistades, y confiando mas ,los unos en los otros.
ResponderEliminarExacto. :)
Eliminar